Open the window para que la mosca fly, de Jaime Espinal




Ay, muchacho, hacete las pajas vos solito. ¿Qué afán de pelar el cobre desde ya? Dentro de 20 años hablamos a ver si todavía le hacés tanta alharaca a este regodeo con la idea de que sos genial, que se hubiera debido quedar en el cajón. O en el baúl rosado, no sé. El tiempo que invertiste pintándote las uñas y probándote un pantalón de látex tras otro, mejor usálo (la tilde es un error, lo sé, pero es para que suene paisa) para leer a Flaubert, o a Poe, o a sir Arthur Conan Doyle, o a Stevenson. Le pegaste a la piñata con el premio de la Cámara de Comercio de Medellín, pero no te la creás... te lo digo yo.
Lo que nos proponés es un conjunto de frases pegadas una tras otra queriendo parecer todas inteligentes. Muchacho, lo dijo un grande de apellido Reed, primer nombre Lou: “I can’t be smart all of the time”. No digo que te dediqués a otra cosa: hay alguna que otra gracia en tu libro y, bueno, lo hiciste, que no es pequeña tarea. Sólo que pensalo bien antes de exponerte. Aunque según las fotos que regás por ahí, te gusta eso. Pero no nos hagás perder el tiempo, por favor, ni tampoco lo perdás vos, con estas anotaciones de libreta convertidas en novela y premiadas por jurados que se dejan embobar con espejitos. Te lo digo pausadito para que lo entendás: au-to-crí-ti-ca.

¿Debo comentar esta novela, hablar de su contenido, estructura y demás? Me da pereza… como me dio pasar de la página 80 y pico (ya estaba peleando por no cerrarla desde la 20). Dicen en la tierra del autor que es la mía también: “esta platica se perdió”.

Jaime Espinal, Open the window para que la mosca fly, Bogotá, Ediciones B, 2007.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Esta novela es el ejemplo perfecto que separa la escritura semiautomática de internet de la literatura. No basta con dar el salto al papel. Muchas horas de lectura de lectura le faltan al autor.

Mosquita muerta.
Anónimo ha dicho que…
Aviso parroquial: Etiqueta Negra, tan dificilita de conseguir en Colombia, tiene por estos días la opción de bajar tres números en PDF en su página:

http://etiquetanegra.com.pe

burgos.
Anónimo ha dicho que…
Debería poner un párrafo ejemplificando el fenómeno. Me interesa ver cómo logra semejante efecto.
Anónimo ha dicho que…
Jajaja, qué buena crítica, qué veneno tan bien usado. Ya sabemos quién es la mosca de la novela. Querido Jaime, qué pena pero ¡fly! Catiarango.
Camilo Jiménez ha dicho que…
En la página de Espinal hay fragmentos cortos de la novela. www.jaimeespinal.com
Anónimo ha dicho que…
Oíste, Tirabuzón (¿o debería decir Tirabufón?), si te creés tan venenoso e irreverente, poné tu nombre. ¿O es que se te afloja la mojón?
Por lo menos Espinal empieza su faxinante novela con la frase "Está bien, lo reconozco, mi nombre es Jaime Espinal y sí, llevo una doble vida. De día soy estudiante de una prestigiosa universidad de la ciudad. Llevo el pelo largo, dos piercings, jeans rotos, una bufanda y unas gafas como las de Clark Kent. De noche soy superhéroe."
Eso es lo que llamo tener cojones. Carebufón, dedicáte (así, con tilde en la A) a hacerte pajas en el ojo.
Nospirín.
Anónimo ha dicho que…
Mentiras, Tirabuzón, muy buena reseña, con esa frase que monté creo que a nadie le quedan ganas de leer la novela. Lo que sí sería bueno es que ponga la cara, no sea gallina.

Chilango.
Belladonna Wild ha dicho que…
pero qué se esperaba de alguien que de perfil (debe haber un término más preciso) pone que es ambidiestro, que fue scout, que escribe cuenticos tiernos, que se levanta tarde...
y no habla de la novela sino de quién y dónde la presentaron y bueno: se encuentra en todas las librerías!!!

la última joyita: se toma la sopa con cuchara!!!
Lucaz ha dicho que…
Creo que esa novela tiene su origen en la "saturación de mercados", como el joven no sale en televisión ni en cine, no canta y al parecer no toca el violín, le dio por ser escritor y desde allí escupirnos su mala crianza paisa (horrible palabreja que él bien merece). Otro Ef. Medina pero sin talento, no se desgaste compadre recomendándole autocrítica o Flaubert...ya el mercado le "asignará su dotación de recursos"...a todos nos pasa..rá.
Anónimo ha dicho que…
me entró mono por leer la novela
Anónimo ha dicho que…
don Camilo se consagra aquí como la cereza que faltaba en el pastel de los avergonzados. Será que también ha mordido de la vergüenza propia antes que ocuparse de la ajena?
Nic ha dicho que…
Huy, este man debe ser fan entregado de The Doors. Ahí si se me salieron los de Trópico Esmeralda.....
Róbinson Úsuga ha dicho que…
Es bueno ver diferentes formas y estilos. Los tiempos cambian. Pero no tengo interés en leer esa novela. Además no creo que sea una novela. El autor parece creerse un genio, y no para de vanagloriarse.
Anónimo ha dicho que…
apesar de los comentarios... debo decir que me encanto esta novela, en realidad me la recomendo un profesor de la universidad y le recomiendo.
ademas yo creo que a espinal no le importa mucho los comentarios por eso cada quien debe de leerlo comprobar si es de su gusto o no.
Anónimo ha dicho que…
apesar de los comentarios... debo decir que me encanto esta novela, en realidad me la recomendo un profesor de la universidad y le recomiendo.
ademas yo creo que a espinal no le importa mucho los comentarios por eso cada quien debe de leerlo comprobar si es de su gusto o no.
Anónimo ha dicho que…
Lo que pasa es que hay que diferencias la escritura o literatura "tradicional" de la industrial, concebida netamente para vender y no perdurar en el tiempo.
Por favor compren mi novela, es ficción urbana colombiana :
http://www.lalibreriadelau.com/catalog/product_info.php/manufacturers_id/42/products_id/10724?sid=031df97f42a88c82bb449bf7fa869f85
Roberto Balbastro ha dicho que…
Qué más se puede decir de un "novelista" que despacha uno de los capítulos de su obra con conversaciones insustanciales en el chat. Por no hablar de buñuelos milagrosos y demás.
No es que esa novela se esté sosteniendo en el tiempo, es que, debo aceptarlo, llegué a ella por pura morbosidad.
Fernanda Reyes ha dicho que…
Whaooo oye te admiro eres una personamuy arriesgada una reseña muy buena, la verdad no me han quedado ganas de leerlo